En un encuentro estratégico, Ruddy Cuellar, director del Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (CEPAD), y Saira Duque, consultora de turismo sostenible, se reunieron con Cristian Oyola, presidente de la Asociación de Grupos Mancomunados de Trabajo MINGA de San Ignacio de Velasco. El propósito de esta reunión fue coordinar esfuerzos para mejorar la producción y productividad de pequeños emprendimientos agroproductivos y artesanales de café en las comunidades indígenas de los municipios de San Ignacio, San Miguel, San Rafael y Concepción, todos pertenecientes a la Asociación MINGA.
La Asociación de Grupos Mancomunados de Trabajo – MINGA surge como un testimonio de la cooperación y apoyo mutuo entre pequeños y medianos productores. Fundada en 1983, la asociación se destaca por cultivar no solo café, sino también almendra chiquitana, frutos silvestres y una cadena de plantas medicinales como miel, maringa, copaibo, entre otros.
El café tradicional chiquitano producido por MINGA es considerado un Patrimonio Cultural Alimentario de San Ignacio de Velasco, destacando la importancia cultural y sostenible de esta práctica agrícola.
La alianza estratégica entre CEPAD, reconocido por su compromiso con el desarrollo sostenible, y MINGA, una asociación arraigada en la cooperación comunitaria, promete fortalecer la capacidad productiva de la región y consolidar prácticas sostenibles en la producción agropecuaria. Esta colaboración refleja un compromiso compartido con el crecimiento económico y la preservación de la riqueza cultural y ambiental en la Región de las Misiones Jesuíticas de Chiquitos, Bolivia.
Esta colaboración se inscribe dentro del proyecto “Mejoramiento de las capacidades productivas de pequeños emprendimientos en la región de las Misiones Jesuíticas de Chiquitos, Bolivia”, proyecto ejecutado por CEPAD Bolivia, con el apoyo de Agencia Extremeña de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AEXCID) y la Asociación para la Cooperación al Desarrollo en el Ámbito Municipal (ACODAM). La visión principal es potenciar el desarrollo de los pequeños emprendimientos agropecuarios y artesanales, generando un impacto positivo en la calidad de vida de las comunidades indígenas.
Fuente: CEPAD