Municipios de los nueve departamentos compartieron experiencias de proyectos que ejecutan dirigidos a promover el turismo y cuidado del medio ambiente, en mejora de la calidad de vida.
El Desarrollo Económico Local (DEL) es un mecanismo que promueve la alianza entre el gobierno municipal y los sectores económicos-productivos de un municipio, para generar fuentes de empleos y contribuir a mejorar la calidad de vida de los habitantes de un determinado territorio promoviendo el desarrollo productivo y económico.
Carlos Hugo Molina, presidente del Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (Cepad-Bolivia), coorganizador del evento junto a la Asociación de Municipios del Beni (Amdebeni), señaló que cada población debe “buscar su orquídea”, en alusión a esta flor utilizada por el municipio cruceño de Concepción para potenciar el turismo en la zona.
En torno a esta flor del lugar, concibieron un festival que permitió a Concepción posicionarse como un importante destino turístico. El resultado es la creación de emprendimientos hoteleros, gastronómicos y artesanales que generan un enorme movimiento económico.
El DEL es un instrumento que permite trabajar en la consolidación de acuerdos y pactos que buscan un mismo objetivo y se alían para trabajar por el desarrollo de su comunidad.
En el norte amazónico, en el municipio pandino de Puerto Rico, han implementado un proyecto de cría de “petitas”.
El gerente de la mancomunidad de municipios del norte amazónico, con base en Riberalta, que asocia a seis municipios de Pando y dos de Beni, Wilfredo Plaza Noguera, detalló que el proyecto funciona hace un par de años, beneficiando a unas 30 familias de pescadores.
Consiste en reponer lo que se extrae furtivamente del medio ambiente; los quelonios o “petitas” (tortugas) de agua así como sus huevos, por costumbre, se consumen de manera masiva. “Esto está afectando al ecosistema y recursos naturales, por eso se ha desarrollado una estrategia que conjugue lo económico, social y ecológico”, dijo Plaza.
Los pescadores han sido capacitados para construir nidales artificiales, de donde eclosionan en cantidades significativas, y una vez que las petitas están de buen tamaño (un año), las devuelven a la naturaleza, mientras que otra parte pueden comercializarla.
“Este es un plan que ha involucrado a 30 pescadores, y con un proyecto piloto lo hemos ampliado hasta otro municipio, además se ha identificado, que según el tamaño, podamos vender las petitas entre 5 y 15 dólares. De acuerdo a nuestros cálculos, si una comunidad tiene la capacidad de criar 1.000 petas en un área de 5 por 5 metros con una profundidad de agua de medio metro, podría obtener como $us 5.000 por año”, explicó Plaza.
Es una oportunidad económica para la población. “En estos dos años, logramos sensibilizar al comunario en favor del medio ambiente. La idea es alcanzar una población de 10.000 petitas para comercializarlas y devolverlas a la naturaleza”, manifestó.
La proyección, en el marco del biocomercio, es la exportación. Sin embargo, primero consolidarán el mercado interno.
Por su parte, Tarija presentó su proyecto de Turismo Productivo, sobre la “Ruta del Vino y Sabores de Tarija”.
En La Paz hay ocho municipios con programas enfocados a la producción de carnes de camélidos. También los municipios de Oruro, donde han construido un matadero de segundo nivel, con miras a exportación de la carne de camélidos y sus derivados.
La provincia Cinti, en Chuquisaca, es la mayor zona productora de cebolla del país.
El Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (Cepad) es una institución que presta apoyo, asistencia y asesoramiento a los actores públicos, privados y de la sociedad civil en general en temas de desarrollo humano, económico y sostenible. Y ahora busca socializar estas experiencias.
Proyectos destacan sus fórmulas
Cada uno de los representantes de los municipios realizó una presentación del modelo de Desarrollo Económico Local que ejecutó para compartirlo como experiencia.
Por ejemplo, el municipio de Trinidad recuperó de sus antepasados la cultura precolombina y combinó con la tecnología del manejo de suelos y agua, un método para construir camellones en sabanas o suelos abandonados para proteger los cultivos de los cambios climáticos, además de ser utilizados como sistemas de riego, garantizando la seguridad alimentaria y generando un desarrollo sustentable para la población.
La Asociación de Municipios de Cochabamba expuso sobre la producción de champiñones que ha lanzado el municipio de Socabamba. En el caso de Potosí han trabajado con la incubadora de empresas y están en la fase de instalar su parque industrial.
Puntos de vista
“Manera eficaz de trabajar”
ERNESTO SUAREZ.
Prefecto de Beni
En el marco de la Constitución y las leyes, se ha permitido asignar el 40% de toda la inversión pública prefectural directamente a los gobiernos locales autónomos para llevar adelante a los 19 municipios. Pero el Gobierno se opone a esta manera eficaz de trabajar entre los municipios y los gobiernos del Beni e intenta evitarla ofreciéndoles mayores recursos a los municipios y sin contar la distribución panfletaria de cheques, pero ahora les está quitando más de Bs 1.300 millones de techo presupuestario para el 2010.
“Hay recursos municipales”
CARLOS HUGO MOLINA.
Director del Cepad
La aplicación de la CPE en las materias que hacen a la responsabilidad municipal han sido muy golpeadas con la reforma constitucional, y no por la incorporación de la autonomía originaria, indígena campesina que era un reto, una responsabilidad y una necesidad para ser integrada al sistema público, sino por la multiplicación de otros organismos territoriales que van a poner en riesgo la labor de todos. ¿De dónde aparecerán los recursos que van a ser ejecutados por las otras autonomías, si sólo tenemos una que es la de los municipios?
“Mancomunidad puede aportar”
JUAN DURÁN LÓPEZ.
Alcalde de Hinojosa-España
Tenemos experiencia de 10 años de gestión entre las mancomunidades mejorando la calidad de vida de esta región. Una de las principales experiencias que se puede destacar y aplicar en Bolivia, es el desarrollo socioeconómico de las mancomunidades. Es la configuración de una asociación de empresarios, consiguiendo que los agentes hagan una representación en esa federación y sea órgano en el que la mancomunidad pueda aportar con ayudas de trabajos técnicos y personal para licitar obras. Con eso se ha generado empleos en la propia zona.