Amante de la vida, escritor y ciudadano en ejercicio», así se denomina Carlos Hugo Molina. Es autor de más de 15 libros en el género de novela, poesía, el ensayo y la investigación social, con temas de administración del Estado, el municipalismo, entre otros. Es presidente del Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (Cepad) e impulsor del periódico ciudadano digital Ahora Bolivia. Ha estado constantemente ligado al arte y la literatura.
SI SANTA CRUZ FUERA UNA PERSONA, ¿CÓMO SE LA IMAGINARÍA?
C.H.M.: Como un o una joven que está en sus 17 años, con toda la fuerza de la capacidad de aprendizaje de cambio, sintiendo que tiene una energía extraordinaria para cambiar el mundo y aprendiendo a enfrentarse a esos cambios que son generados por la edad, por los retos y su necesidad de aprender.
¿CÓMO VE A SANTA CRUZ DENTRO DE UNOS 20 AÑOS?
C.H.M.: Como un referente de desarrollo integral en América Latina. Santa Cruz tiene, por su posición geográfica, por su punto de acceso y contacto dentro del continente, por su capacidad natural productiva y el desarrollo de las capacidades humanas que tiene dentro, propias y adquiridas, como una de las regiones líderes en materia de inclusión y de democracia.
¿QUÉ MEJORARÍA O CAMBIARÍA DE SANTA CRUZ?
C.H.M.: Hay una necesidad de aprendizaje, de seguir abriendo los ojos, la mente y el corazón, en aceptar retos existentes, abrirse al mundo de una manera real y efectiva, la de enfrentarse de manera creativa a esos retos y la de utilizar todas las capacidades construidas para que ese joven pueda convertirse en la persona que dé respuestas y que logre ofrecer lo que se está esperando de ella, por un lado, pero principalmente lo que puede dar por sí misma.
¿QUÉ VALORA DE SANTA CRUZ Y POR QUÉ?
C.H.M.: Hay una suma histórica que aparece como parte de un comportamiento colectivo y es el mirar el mediano y largo plazo, desde el Memorándum del 1904. El segundo es el espíritu, somos y practicamos un optimismo mesurado, hacemos culto de la relaciones de amistad y afecto, del buen genio, del buen vivir, del compartir de lo poco que se tiene, el no limitarse con elementos, trabas, se asumen que son retos. Desde el punto de vista de comportamiento social, Santa Cruz tiene un genio, un duende, que debiéramos tratar de aprovechar, de conservarlo primero y de desarrollarlo después y así seguir adelante.
Fuente: EL SOL