CARLOS HUGO MOLINA*
El supuesto agotamiento del proceso, demostró su fortaleza con el programa Evo Cumple, como única posibilidad de lograr oportunidad y eficacia.
La confrontación con las Prefecturas que no eran masistas generó otra distorsión; el instrumento de las Autonomías Departamentales, que se había clarificado gracias al ejercicio Municipalista, mereció una consigna absurda.
El gobierno impuso el voto NO en el Referéndum por las Autonomía, haciendo que cinco departamentos voten en contra de sí mismos.
Esta situación será corregida con el Referéndum de diciembre, con un voto que sin lugar a dudas, será afirmativo; pero en la confrontación y como una forma de disminuir poder territorial a municipios y departamentos autónomos, en la NCPE proliferan nuevas Entidades Territoriales; el cumplimiento de políticas públicas podrá tener en las autonomías indígenas, regionales, provinciales, municipios indígenas y municipios campesinos, una multiplicación de burocracias en el mismo espacio, con la misma población y sin que varíen los recursos existentes.
El gran logro del Estado boliviano de integrar coherentemente la Planificación, Inversión Pública, Programación de Operaciones y Presupuesto, se verá en entredicho total con Entidades Territoriales Autónomas, de igual jerarquía constitucional y sin relación de dependencia entre sí.
La disminución y condicionamiento de recursos, la imposición de procedimientos dudosos y conflictivos, será la constante previsible. La prueba, ya ha empezado.
*ExSecretario Nacional de Participación Popular, ExPrefecto de Santa Cruz, Presidente del CEPAD.
Fuente: La Razón